Tito Villa anotó el tercer gol en jugada de tiro de esquina, con un remate de cabeza imposible de atajar para Orozco y así culminar la goleada en casa, frente a los Rayados del Monterrey.
Sin embargo el protagonista de la noche fue una vez más Christian Gimenez, que devolvió la efectividad que le estaba haciendo falta a la escuadra Cementera en los últimos dos partidos y de paso termina la malaria de resultados que se prolongaba en el Torneo Clausura 2011.
El encuentro empezó trabado en el mediocampo, sin muchas oportunidades claras de gol. La posesión del balón era intermitente y ni Orozco ni Corona se veían muy exigidos en su labor.
Pero todo cambió al 27, cuando de la nada Giménez tomó un balón de pierna derecha que se fue a meter a la meta Rayada sin que portero pudiera hacer nada por de tenerlo.
La mala noticia de esta jornada es la salida por lesión de Droguett y Torrado. El chileno se empezó a resentir y fue substituido por Aquino, pero en el caso de Torrado, dos entradas fuertes al balón casi en forma consecutiva no le permitieron continuar en el partido. Meza ajustó sus piezas para dar entrada a Romo. Del otro lado Vucetich contestaba con su “talismán personal” Abraham Carreño y Jesús Zavala.
Los Rayados no se terminaron de acomodar con el parado del Cruz Azul, continuaron ordenados en la última línea y sólo en contadas ocasiones fueron en busca de la anotacion de la remontada. Ayoví en un disparo de larga distancia y Carreño en jugada personal intentaron poner en aprietos a Corona pero sus intentos fueron fácilmente controlados por el arquero celeste.
La dupla de argentinos regalaría otra anotación más. Villa sirvió de poste a Giménez, que venía de frente: el Tito aguantó el balón el tiempo necesario para que llegara Chaco, que venía de frente y fusiló a Orozco, que sólo alcanzó a ver el balón pasar.
Minutos más tarde, el mismo que sirvió la anotación tendría recompensa al anotar al minuto 71, con lo que termina con su sequia goleadora. Emmanuel Villa no anotaba desde el partido contra el Toluca y llega así a 8 goles en su marca en este torneo.
Por su parte Giménez llega a 5 goles en este Clausura 2011. Quizá la cuota goleadora no sea tan abultada, pero el aporte del argentino al cuadro de Enrique Meza siempre se hace notar y esta no fue la excepción.
Cuando el “Chaco” levantó los brazos después de anotar su segundo del partido, se dirigió con la mirada a todos los asistentes y en forma muy clara indicaba que el camino a seguir era de frente y sin complejos, como si en esta tarde se hubieran acabado los demonios que tenían atado el equipo en estas ultimas dos semanas de sinsabores.
Sin embargo el protagonista de la noche fue una vez más Christian Gimenez, que devolvió la efectividad que le estaba haciendo falta a la escuadra Cementera en los últimos dos partidos y de paso termina la malaria de resultados que se prolongaba en el Torneo Clausura 2011.
El encuentro empezó trabado en el mediocampo, sin muchas oportunidades claras de gol. La posesión del balón era intermitente y ni Orozco ni Corona se veían muy exigidos en su labor.
Pero todo cambió al 27, cuando de la nada Giménez tomó un balón de pierna derecha que se fue a meter a la meta Rayada sin que portero pudiera hacer nada por de tenerlo.
La mala noticia de esta jornada es la salida por lesión de Droguett y Torrado. El chileno se empezó a resentir y fue substituido por Aquino, pero en el caso de Torrado, dos entradas fuertes al balón casi en forma consecutiva no le permitieron continuar en el partido. Meza ajustó sus piezas para dar entrada a Romo. Del otro lado Vucetich contestaba con su “talismán personal” Abraham Carreño y Jesús Zavala.
Los Rayados no se terminaron de acomodar con el parado del Cruz Azul, continuaron ordenados en la última línea y sólo en contadas ocasiones fueron en busca de la anotacion de la remontada. Ayoví en un disparo de larga distancia y Carreño en jugada personal intentaron poner en aprietos a Corona pero sus intentos fueron fácilmente controlados por el arquero celeste.
La dupla de argentinos regalaría otra anotación más. Villa sirvió de poste a Giménez, que venía de frente: el Tito aguantó el balón el tiempo necesario para que llegara Chaco, que venía de frente y fusiló a Orozco, que sólo alcanzó a ver el balón pasar.
Minutos más tarde, el mismo que sirvió la anotación tendría recompensa al anotar al minuto 71, con lo que termina con su sequia goleadora. Emmanuel Villa no anotaba desde el partido contra el Toluca y llega así a 8 goles en su marca en este torneo.
Por su parte Giménez llega a 5 goles en este Clausura 2011. Quizá la cuota goleadora no sea tan abultada, pero el aporte del argentino al cuadro de Enrique Meza siempre se hace notar y esta no fue la excepción.
Cuando el “Chaco” levantó los brazos después de anotar su segundo del partido, se dirigió con la mirada a todos los asistentes y en forma muy clara indicaba que el camino a seguir era de frente y sin complejos, como si en esta tarde se hubieran acabado los demonios que tenían atado el equipo en estas ultimas dos semanas de sinsabores.
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